Top 10: libros 2023
Cada inicio de año reflexiono sobre los libros que leí el año anterior. Debido a una manía personal de hacer listas de todo, termino siempre organizando las obras en categorías improvisadas. Por ejemplo: los libros más interesantes, libros que no entiendo por qué leí, libros que leí a fuerzas (por el trabajo o por compromiso), libros que no disfruté, libros con portada fea, libros que sin duda recomendaré, entre otras.
Y, claro, también está la lista de los libros que más me gustaron, que no son necesariamente los mejores, sino los que más disfruté por razones a veces desconocidas.
Sin más, el top ten.
10. The Paris Bookseller, de Kerri Maher. Una novela histórica que se toma libertades, según la autora, pero que funciona porque nos lleva al París de hace cien años y pinta con gracia la historia de Sylvia Beach, mente maestra detrás de la librería Shakespeare and Company, la original. También es un homenaje a la vida artística e intelectual de París de esos años.
9. Una semana en la nieve, de Emmanuel Carrère. Segunda novela que leo de Carrère. La primera fue De vidas ajenas, que me decepcionó. Esta volvió a colocar a Carrère en mi radar. Lo seguiré leyendo.
8. El hombre que miraba pasar los trenes, de Georges Simenon. Lo que más recuerdo es la atmósfera de la novela. El personaje principal es memorable. Se llama Kees Popinga y es dinamita.
7. Un año pésimo, de John Fante. Un autor que debería leerse más. Sobre todo, por personas con la ambición de escribir. Fante hace sufrir y reír en la misma oración.
6. Villa Triste, de Patrick Modiano. Un Modiano clásico. Igual a sus demás novelas, pero eso es bueno. Nostálgia, memoria, juegos de luces, ambigüedad y belleza.
5. The Splendid and the Vile, de Erik Larson. Biografía de Winston Churchill. Genial.
4. Agent Zigzag, de Ben Macintyre. En las reseñas decían que se lee como una novela, y sí, y una muy entretenida. La historia de un doble espía durante la segunda guerra mundial, pero es más que eso. Una excelente sorpresa.
3. Five Decembers, de James Kestrel. Una novela llena de imágenes bellas, pero también de violencia y acción. Creo que tiene cerca de quinientas páginas y las leí en cinco sentadas.
2. When We Were Orphans, de Kazuo Ishiguro. Uffff… Una obra tan compleja como bella. A veces me daba miedo leerla porque no sabía a dónde me iba a llevar Ishiguro en el siguiente capítulo. Y es 100% la narrativa de Ishiguro; reconocería un texto suyo, aunque viniera sin firma.
1. Nos vemos allá arriba, de Pierre Lemaitre. De inmediato compré los otros dos de la trilogía. Qué clase de imaginación tiene este autor. Es demasiado bueno.
Mis tres libros favoritos del año son largos. Procuro leer libros cortos por una cuestión de tiempo, pero ahora valió la pena la inversión de tiempo. En particular con los de Ishiguro y Lemaitre, sentí algo cambiaron en mi interior o en mi escritura o en las expectativas que tendré, a partir de ahora, con mis lecturas. Mi año lector fue espectacular y, si bien en otros años leí libros muy buenos, este fue el mejor de los últimos años.
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